Toda una vida... te estaría jugando.
Publicado por Jose Manuel Moldes el 25/03/2024
Los juegos (algunos) son largos, muy largos. Ayer mismo, en el momento que estoy escribiendo esto, terminé Persona 3 Reload (con su final bueno), el remake de la tercera entrega de la serie de Atlus, con un final que se cuela bien alto (casi tanto como la altura de la Tártaro) en los mejores finales que he visto de un videojuego, siendo un final que encaja perfectamente con los temas que trata el juego (vamos a dejarlo en que son temas jodidos y que en más de una ocasión una visita al Psicólogo hubiese solucionado muchos problemas). Pero no vengo hoy a hablaros de finales, o bueno, un poco sí, porque para ver los créditos finales de este P3R he tenido que invertir un total de 132 horas y 29 minutos, un número de horas bastante considerable (aunque aquí no solo está la historia, también mucho contenido secundario), y mientras lo jugaba, en sus últimas horas, empecé a pensar en esos juegos cuyos contadores de horas se acercan (o pasan sobradamente) al centenar de horas, esos que el ratio euro/hora invertido te sale a devolver (Sergio, toma nota).
Aquí no voy a hablar de MMO o MOBAS, porque esos juegos son infinitos (os lo digo en serio, llevo más de 2000 horas a Destiny 2 y esa mierda no se acaba), si no de esos juegos que tienen un fin, aunque ese esté tan lejos que solo se ve como un pequeño punto cuando llevas cerca de 100 horas, y si juntamos todos los juegos que vamos a ver, te daría tiempo a sacarte una carrera por lo menos ¡Comenzamos!
Ya que en la introducción del texto hablaba de la 3º entrega de Persona, hay que decir que decir que en comparación con su 5º entrega podría parecer un juego corto, ya que para completar la historia principal (sin ser completista) necesitaremos unas 100 horas, casi el mismo número de horas que echarías en clase en un curso en la vida real, pero siendo más divertido porque aquí por lo menos somos capaces de ligar más (o de ligar simplemente).
Pero traumas amorosos aparte, si queremos completar todo lo que podemos hacer (y somos capaces de hacerlo en una sola partida) el contador de horas ya asciende hasta casi las 150 horas (muchas menos de las que necesitamos para ligar, para nuestra desgracia), imaginaros lo que subirá si tenemos que darle una segunda vuelta…
Pero si algo bueno tiene Persona 5 Royal, además de ser capaces de ligar por una vez en nuestra vida (ya dejo las bromas sobre nuestra penosa vida amorosa), es que sucede en una ciudad contemporánea, donde tienes todo tipo de comodidades y hay menos probabilidades de morir de vete tú a saber que enfermedad (Takemi te echamos de menos) o atacados por un oso, cosa que en Red Dead Redemption 2 tendremos más complicado, desventajas de la vida del forajido supongo.
Por lo demás, si nos centramos en lo puramente jugable y eres de los que le da TOC dejar cosas sin hacer en el juego que sepas que (además de que te entiendo) necesitarás cerca de 200 horas para completar todo lo que se puede hacer.
Ahora vamos a ponernos serios, si algo tienen los juegos anteriores es que el tiempo que inviertes en ellos, es (más o menos) provechoso, no sientes que te lo roban. Por eso, vengo hoy aquí a exigir una disculpa formal por parte de Monolith por el tiempo que tuve que invertir para sacar un carnet de conducir mechas en Xenoblade Chronicles X, porque sí, no bastaba con que tuvieses que patearte el planeta a pie durante las primeras 15-20 horas, si no que llegado el momento, cuando ya creían que estabas listo para pilotar el mecha, te mandaban sacarte el carnet con misiones que duraban unas cuantas horas, y todo para que solo te dejasen usarlo en modo vehículo (como un coche), ni siquiera como el mecha completo (¡Estoy indignado!).
Ahora que ya me he desahogado, hay que decir que esta entrega desconocida para mucha gente de la saga Xenoblade es una de las más destacadas por su profunda exploración (que ya es decir) y por la recreación de su mundo, y también una de las más queridas por la gente que lo hemos jugado.
Eso sí, si tienes pensado jugarlo prepara un buen puñado de horas (y paciencia, sobre todo paciencia), porque solo su campaña principal son cerca de 70 horas, pero si vas a sacar todo el partido del planeta Mira esa misión te requerirá fácilmente cerca de 300 horas, pero que (casi) todas valen su peso en oro por ver una recreación y una exploración tan fantástica.
Aquí os voy a ser franco, cuando jugué Fire emblem: Three Houses pensaba que sería un juego de unas 30/40 horas (no había jugado a ningún juego de la saga antes), pero os podréis imaginar mi cara los que lo hayáis jugado, cuando transcurridas esas horas solo había llegado al cliffhanger del juego (que está más o menos por la mitad de la historia).
Pero más gracia os hará cuando penséis en la cara que puse cuando me enteré de que dependiendo a qué clase de las tres le vais a dar clase (jeje) verás un final totalmente diferente de la historia y que nada tiene que ver con los otros. Pero es que todavía se puede rizar más el rizo, porque una de las rutas tiene un final secreto que te obliga a rejugarla otra vez si quieres verlo. Si a todo esto le añadimos que una partida (siendo completista) te puede durar cerca de unas 80 horas, el ver todos los finales se te puede ir fácilmente (inserte meme de señora con los cálculos aritméticos aquí) a las 300 horas.
Vamos a quitar un poco el pié del acelerador para descansar un poco, ya que este Tales of Xillia no pasa de las 300 horas (gracias a dios), pero no por ello es un juego corto, porque aquí, al igual que en Fire Emblem, tenemos varias rutas, dos para ser exactos, asociadas a dos personajes, pero no os asustéis, las dos llegan al mismo puerto, lo que las diferencian es que juegas las partes donde no está el otro.
Pero que esto no os engañe, porque esto no lo hace menos corto, una sola ruta si somos de hacerlo todo se nos puede ir fácilmente a las 60 horas. La parte buena (o eso dicen) es que al volver a empezarlo para jugar la segunda ruta te permite activar unos “trucos” que te facilitan el progreso, haciendo que la segunda vuelta reduzca considerablemente el número de horas, pero dejándolas igualmente cerca (o superando) el centenar de horas, pero creedme, cara minuto de esta aventura vale su peso en oro.
Aquí también podríamos meter su segunda parte, que de duración va sobrada, pero no quiero que me llamen para exigirme dinero (quién lo jugó, lo entenderá).
Ahora vamos hablar de dragón en la habitación. Skyrim es largo, muy largo, extremadamente largo, puede que no en su historia (aunque su duración también es considerable), pero que levante la mano quién haya sido capaz de ir a tiro fijo a completar la historia y no se haya desviado un minuto para coger un cofre y haya acabado 4 horas después en la otra punta del mapa ayudando a un desconocido a terminar con unos bandidos que le robaron un collar de latón que era de su difunto tío abuelo que lo trajo de Cyrodill metido en el cu…Bueno, ya me entendéis ¿No?
Pues eso es Skyrim, un juego de explorar y explorar y explorar…Y eventualmente seguir con la historia, así que si os consigue atrapar, no os soltará hasta bien pasadas las 200 horas…Y si no juegas a sus DLC (Que a lo tonto te pones hacer una casa y acabas recalificando los alrededores de Cauce Boscoso).
Y si hablamos de desviarnos medio minuto para recoger Espino Cerval y acabar 5 horas después jugándonos a Sardinilla en una partida de Gwynt, entonces tenemos que hablar de The Witcher 3, el cierre de la trilogía de CD Project Red. El simulador de cazador medieval y herborista amateur nos llevará a recorrer su mundo en busca de Ciri (Un poco la serie de Marco pero al revés y con más ghouls) durante casi 60 horas que nos puede durar la historia principal.
Pero claro, hablamos de un RPG, y como buen exponente de género, tenemos una cantidad ingente de misiones secundarias, cacerías, búsquedas del tesoro y posibilidades de romance sobre un ca… bueno, eso último es un poco PEGI +18.
Si conseguimos hacer todo el contador de horas puede subir hasta cerca de las 200 horas, y eso sin contar sus DLC, que podría aumentar ese número hasta cerca de las 300 horas.
Si lo de cazar y hacerte un armadura con el cráneo de tus víctimas te gusta pero lo de ayudar a tus conciudadanos lo llevas regular, entonces tu juego es Monster Hunter World, el simulador de aniquilación y extinción de especies de Capcom nos propone diezmar a toda la población de monstruos vivientes solos o en compañía de nuestros amigos (nada une más a dos personas que erradicar a todos los Rathalos) durante las más de 40 horas que dura la campaña.
Pero si vais en serio con lo del exterminio de especies y queréis hacerlo todo, entonces vete preparando cerca de unas 400 horas para dicha tarea (hay gente que ha ido menos horas a clase este año).
Y hasta aquí este pequeño repaso con toques humorísticos de este humilde bufón. Al final se me ha quedado un poco más largo de que imaginaba, así vamos a dejar la lista en 8 juegos, pero si veo que gusta igual podría hacer una segunda parte, porque si de algo va sobrada esta industria, es de juego que te pueden durar todo el año.